Cada día se movilizan millones de toneladas de materiales, productos y bienes de todo tipo. Numerosas operaciones que pueden realizarse de forma eficiente o ineficiente, óptima o mejorable. Descubrimos cuáles son las características que diferencian al mejor transporte de mercancías.
El transporte de mercancías, clave en la cadena de suministro
La cadena de suministro implica a numerosos procesos, ya sea de forma directa o indirecta. El transporte de mercancías por carretera es una parte clave en toda cadena, ya que de su buen hacer depende que no aumenten los costes y que el receptor encuentre la mercancía en perfectas condiciones.
Está al día de la última normativa
Los recientes cambios en la legislación sobre la estiba son el mejor ejemplo de hasta qué punto es imprescindible estar al día de las últimas actualizaciones de las normativas. En un sector en el que se deben cumplir numerosos requisitos, tanto por parte de las empresas, como de los transportistas, como de los vehículos, cumplir con todas las exigencias tiene la ventaja añadida de que evita sanciones, lo que se traduce en puntualidad.
Adapta el tipo de mercancía al tipo de vehículo
No solo se trata de que para el transporte de un tipo de producto (refrigerado, sólido, líquido, etc.) haya que utilizar un vehículo, en muchas ocasiones, específico. El mejor transporte de mercancías sabrá distribuir en sus tráileres y furgonetas las mercancías de tal forma que el desplazamiento se realice con la mayor eficiencia posible. Es decir, con el menor volumen en vacío del que se sea capaz.
Sabe dónde está y dónde ha estado la mercancía
La trazabilidad es uno de los pilares del transporte de mercancías moderno. Los sistemas de gestión de flotas actuales permiten conocer en tiempo real dónde se encuentran los vehículos de una flota y sus correspondientes mercancías. De esta forma se realizan rutas más eficientes, eligiendo él recorriendo más rápido y evitando circular por vías en las que haya congestiones de tráfico y otros imprevistos.
Permite la logística inversa
El flujo de productos puede requerir la gestión de una logística inversa con los menores costes posibles. Las ventajas y desventajas de la logística inversa pasan por la devolución de materiales o bienes que puedan efectuarse. El mejor transporte de mercancías es aquel capaz de aprovechar los desplazamientos de regreso y de hacerlo al menor precio.
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