Hoy en día, cuando hablamos de logística y transporte es habitual que ambos conceptos se asocien e, incluso, se confundan entre sí.
Entender las diferencias entre logística y transporte si no estás dentro del sector a veces es tarea complicada, por ello, en este artículo hablaremos sobre algunas de sus similitudes y, en mayor medida, sobre sus principales diferencias. Estas diferencias notables hacen que, aunque logística y transporte estén íntimamente ligados, sigan siendo elementos diferentes que se ocupan de funciones distintas.
Los dos elementos, logística y transporte, junto con el término cadena de suministro, se pueden jerarquizar, aunque se encuentran, en realidad, unos dentro de los otros:
Cadena de Suministro > Logística > Transporte
¿Qué es la cadena de suministro?
La Cadena de Suministro es el eslabón superior, es decir, la visión de conjunto dentro del subsistema de una organización.
Técnicamente una cadena de suministro es el conjunto de actividades, instalaciones y medios de distribución necesarios para llevar a cabo el proceso de venta de un producto en su totalidad. En otras palabras, la cadena de suministro es el conjunto de fases que engloban la búsqueda de materias primas, su transformación, transporte y entrega al consumidor final en condiciones óptimas.
Fases de la cadena de suministro:
La cadena de suministro no siempre es la misma, su forma y las actividades que incluye dependen del bien o servicio que estemos analizando. Esta debe estar siempre adaptada a la naturaleza de la empresa, y, aunque en todas ellas suele haber múltiples fases o etapas, podemos hablar de 3 procesos fundamentales:
- Suministro. Como su nombre indica, se encarga de la compra de suministros y materias primas. Cómo y dónde obtenerlas, dónde almacenarlas, cómo y de qué manera estos materiales han de ir de un lugar a otro, la negociación de precios, el control sobre la demanda y su previsión, su trazabilidad, la elección de proveedores estratégicos, la localización de almacenes y centros de distribución, y un sinfín de tareas más.
- Fabricación. Se encarga de la transformación de dichas materias primas en objetos elaborados. Es el momento en sí de hacer físico el producto.
- Distribución. Se encarga de distribuir o hacer llegar dicho producto ya elaborado a los diferentes puntos de venta encargados de ponerlo en las manos del consumidor final.
Una correcta gestión de la cadena de suministro permite que los procesos clave de la empresa relacionados con costos, disponibilidad y calidad para incrementar los márgenes se conviertan en una realidad. De esta manera, se creará una cadena de suministro impulsada por la demanda, donde sitúa al cliente en el centro de la misma.
Esta tiene como objetivo principal satisfacer las necesidades del cliente final de la mejor manera posible. Para cumplir con su objetivo es muy importante la sincronización en las siguientes tareas:
- Entregar los bienes y servicios a tiempo.
- Manejo adecuado de inventarios y almacenes.
- Evitar las pérdidas o desperdicios innecesarios.
- Optimizar los tiempos de distribución.
- Establecer canales de comunicación y coordinación adecuados.
¿Qué es la logística?
La logística tiene funciones fundamentalmente estratégicas. Es la encargada de coordinar, planificar y gestionar todas las partes y procesos que hacen posible la circulación de los productos desde su estado primario hasta convertirse en el producto final en manos de los clientes. Por lo tanto, esta se encarga de todo lo relacionado con un producto final en cuanto a almacenamiento, inventario, venta, transporte y servicio al cliente.
Las tareas que implica la logística integral son muy variadas, pero todas ellas forman parte de una visión integral basada en la efectividad, la eficiencia y la eficacia.
Su gestión es una parte muy importante de la cadena de suministro, ya que controla la eficiencia del transporte, la correcta ejecución de las actividades en el almacén, las operaciones de preparación de pedidos y el sistema de almacenaje para su posterior distribución.
Al igual que en la cadena de suministro su objetivo primordial es el cumplimiento de las expectativas de los clientes, satisfaciendo la demanda en las mejores condiciones de servicio, calidad y coste. Garantizar la calidad del producto y/o servicio aportará, por un lado, una ventaja competitiva y por otro la reducción de costes, lo que permitirá aumentar el beneficio de la empresa.
¿Qué es el transporte?
El transporte de mercancías es una de las actividades económicas más importantes para un negocio, ya que proporciona el flujo de inventario desde los puntos de origen hacia los destinos o puntos de consumo.
Se trata de un servicio fundamental que vincula a la empresa con sus proveedores y con sus clientes, por lo tanto, es una actividad esencial en la logística, y por supuesto, en la cadena de suministro.
El suministro de las grandes marcas y empresas conlleva un proceso, en ocasiones, complejo, que necesita que todas sus partes cumplan a la perfección para dar como resultado la elaboración de un producto adecuado y la entrega en fecha para el cliente. Ello requiere que el transporte de mercancías, ya sea transporte internacional o nacional, sea planificado a conciencia.
Tan importante es el transporte de mercancía en la cadena de suministro que a veces esta actividad es la responsable de la confianza o la frustración que se produce en nuestros clientes:
Los retrasos en las entregas, las confusiones o los daños en los productos pueden ser la fuente de las quejas y provocar insatisfacción.
Cuando una empresa realiza a tiempo las entregas de los productos y en excelentes condiciones esto puede generar más confianza en los clientes.
Diferencias entre Logística y Transporte
La principal diferencia recae en la amplitud que abarcan los conceptos, ya que la logística engloba una gran cantidad de operaciones relativas al suministro de mercancías, mientras el transporte es solo una de las fases que forman parte de ese proceso. Entendemos que la logística engloba las tareas de planificación y ejecución, además de la gestión del transporte. Ahí reside su principal diferencia, que el transporte está limitado únicamente a las labores de desplazamiento.
Para garantizar que la cadena de suministro funcione a la perfección sin ningún tipo de irregularidad Ambas disciplinas deben trabajar de forma conjunta y compenetrada. Si esto se logra, garantizará el máximo rendimiento posible con la mayor calidad, es decir conseguiremos la eficiencia en nuestro trabajo.
Ventajas de las empresas de logística y transporte
Una de las modalidades más demandadas por las empresas es la de contratar una empresa de transportes que también ofrezca soluciones de almacenamiento y logística al mismo tiempo.
Hoy en día es muy habitual, entre los proveedores de transporte, que una de sus evoluciones naturales sea la de pasar de transportista a la consideración de operador logístico. Esto sucede a medida que las empresas van creciendo, ampliando los servicios que ofrecen y completando su oferta.
Uno de los factores más importantes para mejorar la satisfacción del cliente es la entrega de la mercancía deseada, en las condiciones prometidas y en el lugar y tiempo exigido, por lo que contar con un proveedor de confianza que ofrezca un servicio integral de gestión logística y distribución será clave parte fundamental del éxito.
Las principales ventajas de una empresa de logística y transporte (con el mismo proveedor) son:
- Rapidez. Al dedicarse a ambos servicios, se acorta el número de intermediarios, lo que hace el canal de distribución más corto y rápido. Esto hará que la satisfacción de nuestros clientes aumente entregándoles un producto en las condiciones y tiempo prometidos.
- Bajo coste. Al crear nuestra alianza con un proveedor de confianza que ofrezca ambos servicios en vez de buscar distintos proveedores para ello, reducimos costes o control de costes.
- Especialización. Se aprovecha la experiencia de una empresa en todo lo relacionado con los permisos y demás temas legales de almacenaje y transporte de mercancías.